Este eficiente chip más pequeño que un grano de arroz podría ser la clave para redes WiFi de bajo consumo en el hogar
Cada vez tenemos más objetos conectados en casa que se comunican usando redes inalámbricas, en segundo plano, enviando información de múltiples sensores, imágenes, vídeos de vigilancia, temperaturas, datos sobre humedad, calidad del aire o simplemente pequeños mensajes de estado.