Despídase de controlar su cara si alguien la usa en una base de datos
Distintas investigaciones demuestran que, cuando un conjunto se publica, resulta imposible evitar que se expanda y se use por terceros, incluso aunque se borre poco después. La comunidad de la inteligencia artificial necesita solucionarlo para seguir avanzando sin amenazar la privacidad y la ética de la gente